La pintura antideslizante es una solución especialmente diseñada para evitar deslizamientos en superficies. Se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones, como pasillos, escaleras, piscinas, baños y áreas de trabajo, como la señalización de zonas de carga y descarga, etc. Este tipo de pintura contiene un tipo de árido añadido que dependiendo de su granulometría conseguiremos una estabilidad mayor en la superficie. Entre otros compuestos también pueden incluir partículas de vidrio triturado, aluminio o sílices.
Lo que comúnmente se denomina pintura antideslizante, es caracterizada por tener una textura rugosa o granulada que proporciona una tracción adicional para evitar los deslizamientos. Esta textura se logra mediante el uso de compuestos adicionales en la pintura. Además, la pintura antideslizante suele ser más resistente al desgaste y a la intemperie que otras pinturas, lo que la hace ideal para áreas al aire libre o ambientes con alta humedad.
Existen varias opciones de pintura antideslizante disponibles, cada una con sus propias características y ventajas. Algunas pinturas antideslizantes son resistentes al agua, al aceite y a los productos químicos, lo que las hace óptimas para áreas industriales.
Otros tipos de pintura antideslizante incluyen aquellos que son resistentes a altas temperaturas, lo que los hace adecuados para áreas donde la temperatura sea mucho más elevada. Además de ser segura, la pintura antideslizante también es duradera y resistente al agua. Esto la convierte en una opción ideal para áreas expuestas a la humedad, como piscinas y baños. También es resistente a la abrasión y a la intemperie, lo que la hace adecuada para uso en exteriores.
Certificación de pintura antideslizante
La certificación de la pintura antideslizante se clasifica en 3 clases que dependen de los tipos de superficies y zonas a aplicar, las cuales están representadas en el cuadro de a continuación:
| Localización y características del suelo | Clase |
| Zonas interiores secas
– Superficies con pendiente menor que el 6% – Superficies con pendiente igual o mayor que el 6% y escaleras |
1
2 |
| Zonas interiores húmedas, tales como las entradas a los edificios desde el espacio exterior (1), terrazas cubiertas,
vestuarios, duchas, baños, aseos, cocinas, etc. – Superficies con pendiente menor que el 6% – Superficies con pendiente igual o mayor que el 6% y escaleras |
2
3 |
| Zonas exteriores. Piscinas (2). Duchas. | 3 |
| (1) Excepto cuando se trate de accesos directos a zonas de uso restringido.
(2) En zonas previstas para usuarios descalzos y en el fondo de los vasos, en las zonas en las que la profundidad no exceda de 1,50 m. |
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En Landecolor, Pinturas Rocha tenemos infinidad de opciones entre las que se encuentran:
El Rochadur 400 plus antideslizante y el Rochacoat epox 671 antideslizante, ambos productos con certificado de resbaladicidad del suelo clase 3.
Aplicación Rochadur 400 Plus antideslizante
Estos productos, además de haber sido aplicados en multitud de superficies , están clasificados con el mayor grado de resbaladicidad del suelo, clase 3 , lo que los convierte en productos muy seguros de grandes prestaciones.
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Variedades y Ventajas de la pintura antideslizante
La pintura antideslizante está disponible en una amplia variedad de colores y texturas, por lo que es fácil encontrar una opción que se adapte a su estilo y necesidades.
En primer lugar, es una solución económica y fácil de aplicar. No requiere ningún tipo de equipo especial y puede aplicarse en cualquier tipo de superficie. Además, poseen una gran durabilidad y resistencia a la abrasión, por lo que no requiere mantenimiento frecuente.
Otra ventaja de la pintura antideslizante es que es segura. Evita resbalones y caídas, lo que es especialmente importante en áreas con tráfico elevado o donde hay un mayor riesgo de accidentes, como en escaleras o pasillos. También es ideal para áreas con una población más vulnerable, como ancianos o niños.
La historia de la pintura antideslizante
Los orígenes de la pintura antideslizante se remontan al siglo XIX, cuando la industria naval empezó a utilizar un tipo de pintura especial para cubrir las cubiertas de los barcos y evitar que los marineros se resbalaran en ellas. Esta pintura se hacía mezclando arena con pintura normal y aplicándola en la superficie para crear una textura rugosa que proporcionaba un mejor agarre.
A medida que la pintura antideslizante se volvió más popular en la industria naval, comenzó a ser utilizada también en otros sectores. Durante la Primera Guerra Mundial, se utilizó para mejorar la seguridad en las trincheras y en las cubiertas de los aviones. Posteriormente, la pintura antideslizante se utilizó en la construcción de carreteras y en otras aplicaciones comerciales e industriales.
En la década de 1960, la pintura antideslizante comenzó a utilizarse en la industria alimentaria para prevenir deslizamientos en las áreas de producción. Los restaurantes, bodegas y fábricas de alimentos comenzaron a utilizarla en sus pisos para proteger a sus empleados y clientes.
En la actualidad, la pintura antideslizante es una característica estándar en muchos tipos de suelos y superficies. Se utiliza en entornos industriales, hospitales, escuelas, centros comerciales y muchos otros lugares donde la seguridad es una preocupación importante.
